Abogado: Alfaro y su fiscal se quieren lavar las manos en detenciones ilegales
Óscar Arturo Díaz Torrejón, abogado del director operativo (J3) de la policía investigadora, Salvador Perea Rodríguez señaló que en la Fiscalía no le han permitido hablar con su cliente, con el objetivo de que se declare culpable de abuso de autoridad, de realizar detenciones ilegales y de desaparición forzada de manifestantes.
Salvador Perea fue detenido junto con el policia ministerial, Raúl Gómez Mireles, luego de que presuntamente el pasado viernes seguieron órdenes del crimen organizado para detener el pasado a manifestantes en las inmedicaciones de la Fiscalía del estado.
Óscar Díaz dijo que no le han permitido tener contacto con su cliente, y que están «presionado al comandante Perea para que acepte la responsabilidad, por eso no dejan entrar a ningún defensor».
Agregó que presentaron un amparo, pero el Juez de Distrito nunca mandó al secretario, también acudieron a solicitar apoyo a Visitaduría, a la Comisión Estatal de Derechos Humanos y a la Fiscalía Anticorrupción, pero «estaba cerrado».
El abogado recalcó que el gobernador, Enrique Alfaro, y el fiscal estatal, Gerardo Solís Gómez gozan de una buena relación con los titulares de las dependencias y organismos mencionados, por lo que considera que “todos se coligieron para bloquearnos la estrategia de defensa. Ellos están tratando de lavarse las manos, y que tanto Perea como Mireles, Jalisco los vea como culpables cuando son víctimas de las irresponsabilidades de estos señores».
Óscar Díaz apuntó que a los imputados se les asignó un abogado de oficio de la propia Fiscalía, puesto que les informaron que sus defensores particulares no se presentaron, «lo cual es mentira».
Familiares y amigos de los detenidos se manifestaron afuera de Casa Jalisco para pedir su liberación, aseguran que ambos siguieron instrucciones de sus superiores.
A los jóvenes que presuntamente detuvieron de forma ilegal, se dirigían a protestar afuera de la Fiscalía para exigir la liberación de los arrestados el jueves, tras la violenta manifestación en el centro de la ciudad, en que se pedía justicia por la muerte de Giovanni López quien murió a manos de policías de Ixtlahuacán de los Membrillos.